El Sonoma Complex de 2017, que incluía los incendios Tubbs y Nuns, reveló y agravó la profundidad y la amplitud de las inequidades dentro de nuestra comunidad, especialmente para las personas que no hablan inglés en el Condado de Sonoma.
Desde los huecos en el acceso al lenguaje para las comunidades lingüísticamente diversas, hasta los defectos en las alertas de emergencia y los sistemas de advertencia, el Condado aprendió que hay trabajo que se tiene que hacer. Conforme las distintas comunidades en el Condado de Sonoma continuaron con su recuperación, los siguientes desastres naturales y la pandemia siguieron exponiendo los retos que las comunidades de color enfrentan para acceder a los recursos y a la ayuda que aseguran una recuperación equitativa. Como institución de gobierno, el Condado entendió que era crítico el darles prioridad a estas comunidades marginadas, para prevenir futuros daños en la salud mental y física de sus residentes, así como en su bienestar financiero.
En diciembre de 2017, el Personal del Condado sostuvo una reunión de ayuntamiento para escuchar lo que estas comunidades vieron y experimentaron durante los incendios. El personal del Condado escuchó que aquellos en las comunidades Latinas, indocumentadas, que hablan solo español e indígenas no recibieron comunicaciones adecuadas de emergencia, lo que afectó su bienestar y su seguridad. Dado que hubo una falta de comunicación con los que no hablaban inglés, muchos tuvieron miedo y no recibieron instrucciones adecuadas para su seguridad.
Desde 2018, el Condado de Sonoma ha tomado pasos muy importantes para reconocer y abordar la necesidad de atender y desmantelar estas inequidades. A nivel nacional, los datos muestran consistentemente que la gente pobre y las comunidades de color experimentan desproporcionadamente los impactos negativos de tales desastres.
Uno de los primeros pasos que el Condado tomó fue contratar a un oficial de información pública bilingüe para desarrollar y crear un enlace entre las comunidades de habla hispana y los servicios del gobierno. Alrededor del mismo tiempo, muchos departamentos del Condado se unieron a la Alianza de Gobierno sobre Raza y Equidad, una red nacional de agencias de gobierno que trabajan para lograr la equidad racial y mejorar las oportunidades para todos.
En enero 2020, la Junta de Supervisores incluyó un pilar de Equidad Racial y de Justicia Social durante el desarrollo de su Plan Estratégico, para abordar y darles prioridad a los datos que muestran que las comunidades latinas y que hablan lenguas indígenas del condado son afectadas de manera desproporcionada por los desastres. La inclusión de este pilar vino como resultado del trabajo del personal que curso el programa de la Alianza de Gobierno sobre Raza y Equidad. La Junta de Supervisores aprobó la creación de la Oficina de Equidad en julio 2020, y Alegría De La Cruz fue seleccionada como la directora en septiembre 2020. A la Oficina de Equidad se le asignó la tarea de alcanzar las metas y objetivos de dicho pilar. Parte de este trabajo incluyó evaluar las necesidades, internas y externas, para cambiar la cultura y para trabajar con la comunidad para encontrar soluciones a las causas de raíz de las inequidades que experimentan los residentes.
Adicionalmente, la oficina trabajo para entender y apalancar su posición como agencia de gobierno para cambiar la cultura y la respuesta a las necesidades de las comunidades de color. La dirección a largo plazo, bajo el pilar del Plan Estratégico, es alcanzar la equidad racial en los servicios del Condado y asegurar una fuerza de trabajo que refleje a la comunidad a la que sirve.
En marzo 2022, la Oficina de Equidad también se asoció con el Departamento de Manejo de Emergencias para la creación del primer Plan de Operaciones de Emergencia en el estado que incorpora la competencia cultural. La Oficina de Equidad lideró el proceso de involucramiento de la comunidad, para que se incluyan las voces y experiencias de los defensores de la comunidad que han estado pidiendo mejoras que respondan culturalmente a la respuesta del Condado ante las emergencias.
Justo cuando los incendios de 2017 impactaron desproporcionadamente a las comunidades de color, también lo hizo la pandemia de COVID-19, y la Oficina de Equidad facilitó a su grupo de trabajo de equidad del Acta del Plan de Rescate Americano, para determinar las áreas a donde se deben de asignar fondos y así apoyar a las comunidades más afectadas por la pandemia.
Recientemente la junta aprobó fondos del ARPA para la Oficina de Equidad, para que desarrolle planes y recomendaciones para un mayor involucramiento comunitario y acceso al lenguaje.