El reto rápidamente se hizo claro durante los incendios de 2017: El Condado de Sonoma necesitaba nuevas reglas que mantuvieran seguros a los trabajadores agrícolas mientras que les proporcionaban a los productores de uvas, rancheros y a otras compañías agrícolas algún tipo de acceso a sus propiedades durante los desastres.
Las ordenes obligatorias de evacuación han sellado grandes secciones del Condado de Sonoma, cuando solo un poco más de la mitad de los 1.1 millones de acres del condado están clasificados como tierras agrícolas. Los operadores agrícolas urgentemente necesitaban tener acceso a sus propiedades para regar sus cultivos, mover a los animales a un lugar seguro, cuidar al ganado que quedaba y recargar de combustible los generadores de emergencia.
El Condado se trajo la idea del vecino Condado de Napa, permitirles a los operadores agrícolas el entrar a las zonas de evacuación, en una base de caso por caso, si el trabajo se determinaba que era esencial y se pudiera desarrollar con seguridad a los ojos de la seguridad pública y el personal de emergencia.
“Queríamos ayudar a proteger los recursos agrícolas de los incendios y lo hicimos de una manera que se sentía segura”, dijo el Comisionado Agrícola del Condado de Sonoma, Andrew Smith. “Hemos aprendido mucho del incendio Tubbs y de los cambios permanentes que han ocurrido en nuestra comunidad como resultado”.
En los años que siguieron a los incendios de 2017, el Departamento de Agricultura, Pesos y Medidas ha seguido coordinándose con los oficiales de manejo de emergencias, grupos comunitarios, primeros auxilios y seguridad pública para hacer mejoras a las prácticas del Condado durante cada desastre subsecuente. Los esfuerzos culminaron en agosto 2022, cuando la Junta de Supervisores aprobó un nuevo programa que incluye tarjetas de verificación que les permite a los operadores agrícolas y a los empleados de tiempo completo el entrar con seguridad a las zonas de evacuación para desarrollar actividades críticas.
Para desarrollar la política, el Condado invitó a 43 grupos interesados para proporcionar sus comentarios y sostener 18 juntas con dichos grupos desde 2019. En febrero, la Junta de Supervisores estableció un comité al propósito para explorar diferentes modelos para programas de acceso a las zonas de evacuación, con un enfoque en la protección de los trabajadores agrícolas. El comité incluyó representantes del Departamento de Agricultura, Pesos y Medidas, el Departamento de Manejo de Emergencias del Condado, la Oficina del Alguacil, la Oficina de Equidad y Extensión Cooperativa de la Universidad de California.
Bajo el programa, las compañías agrícolas comerciales pueden obtener tarjetas de acceso para los operadores y empleados de tiempo completo. Las tarjetas facilitarán – pero no garantizarán – el acceso a las áreas evacuadas para que dichos operadores puedan desarrollar varias actividades críticas, incluyendo cuidar a los animales, regar los cultivos, y apoyar al personal de emergencia. Cosechar o sembrar cultivos, procesar alimentos y las reparaciones en las instalaciones no se consideran actividades elegibles.
Los titulares de las tarjetas deberán tomar un entrenamiento en persona de seguridad contra incendios y para el trabajador, en el lenguaje que escojan. Los operadores agrícolas deben de cumplir con las regulaciones de seguridad para los trabajadores estatales y federales, incluyendo acciones de protección necesarias debido a las condiciones cambiantes (p. ej. el humo de los incendios). El uso de una tarjeta de acceso es voluntario y los patrones no les pueden exigir a los trabajadores que entren a una zona de evacuación. La Oficina del Alguacil va a administrar el programa.
Al proporcionar cierto nivel de acceso a las áreas evacuadas, para actividades agrícolas comerciales, el programa se espera que apoye el cumplimiento de las órdenes de evacuación, según los oficiales seguridad pública y de manejo de emergencias.
“Hasta ahora, cada juego de verificaciones para accesos agrícolas estaba aislado para el incidente por el incendio que se presentaba”, dijo Smith. “Hoy, nuestro programa está reconocido por el condado y por el estado y seguiremos trabajando en esto como un tema de seguridad y atendiendo cualquier preocupación que pudieran tener los miembros de la comunidad a lo largo del camino”.